La alta cantidad de aguas residuales que llegan aguas del Golfo de México, afectan al Sistema Arrecifal Veracruzano debido a que la absorción de nutrientes debe ser de manera acelerada, esto genera una competencia entre las algas que surgen y los arrecifes, lo que se traduce en desplazamiento de especies, señaló el director del Sistema Arrecifal Veracruzano, José Carlos Pizaña Soto.
El impacto de este desequilibrio se traduce en un desplazamiento de especies marinas, ya que las algas invaden los espacios que los corales solían ocupar, debilitando así la estructura y la salud del arrecife. Este desplazamiento no solo afecta la biodiversidad local, sino que también altera el equilibrio de todo el ecosistema marino en la región.
“Todos los ecosistemas funcionan de manera natural con nutrientes y procesos ecológicos como la fotosíntesis y la absorción de nutrientes y el Sistema Arrecifal Veracruzano no es la excepción. Al aportar aguas no tratadas que además llega con materia orgánica aporta nutrientes y el sistema tiene cierta capacidad de absorción o dilución pero aquí tenemos la presencia de estos materiales de manera frecuente”.
El fenómeno es comparable a lo que ocurre cuando se deja estancada el agua en una pileta: los nutrientes en exceso permiten que proliferen las algas, cubriendo la superficie y dando lugar a un ambiente verde. En el caso del arrecife, esta proliferación de algas crea una competencia directa con los corales, desplazando a las especies que dependen de ellos.