Las recientes lluvias en Veracruz han causado una disminución del 50% en la producción pesquera, según Bernardo Hernández Guzmán, presidente de la Federación de Pescadores de Veracruz.
«Todavía seguimos pagando la consecuencia de estas lluvias que han sido bastante abundantes… hoy el agua está revuelta, la pesca no es como otros años», dijo.
La turbidez del agua y la presencia de sedimentos han alejado a las especies de las costas, dificultando la labor de los pescadores. Además, las lluvias y los vientos generan condiciones de seguridad precaria para los hombres de mar.
«Las lluvias vienen acompañadas de viento, rayos… desalienta un poco al pescador por meterse a la mar, más que nada por su seguridad», agregó Hernández Guzmán.
A pesar de la disminución de la producción pesquera, los precios de pescados y mariscos se mantienen.
Los pescadores esperan que las condiciones mejoren pronto para poder retomar su actividad con normalidad.