Las autoridades sanitarias de España declararon que las personas con Covid-19, infectadas después de la aplicación de la primera dosis, tendrán que esperar seis meses para recibir la inyección de refuerzo de las vacunas disponibles, a excepción de los grupos de riesgo, como aquellos con más de 65 años, que serán inoculados inmediatamente después de la recuperación, pero ¿qué medidas tomará México?
Hasta el momento, los gestores de salud pública de nuestro país no han establecido un protocolo para abordar este tipo de casos. Mientras que la Ciudad de México cambia de semáforo amarillo, las escuelas vuelven a las aulas virtuales, y se establecen nuevas medidas para contener los contagios, aún no se cuenta con un registro que contabilice la incidencia de los nuevos positivos en personas vacunadas con una sola dosis.
Las vacunas antiCovid han sido diseñadas para inhibir la sintomatología de la enfermedad, esto quiere decir que evitan que las personas infectadas la padezcan de forma moderada o grave, disminuyendo la probabilidad de requerir asistencia respiratoria u hospitalización.
De acuerdo con un estudio reciente de «Public Health England», los viales de Pfizer-BioNTech y Oxford-AstraZeneca protegen a los vacunados en un 96% y 92%, respectivamente.
Los expertos aseguran que para alcanzar este grado de inmunización es necesaria la aplicación de ambas dosis, que alcanzan su punto máximo, luego de los siete a 28 días.
Pese a que la evidencia científica ha demostrado la fiabilidad de estos tratamientos, los investigadores han afirmado que las vacunas no impiden la transmisibilidad del virus. Por ello, la importancia de continuar con las medidas de protección personal, como el uso de cubrebocas y la distancia social, aún después de ser inoculados.
De acuerdo con los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC), un porcentaje bajo de personas puede contraer el Covid-19 aunque ya haya recibido el tratamiento completo. Para identificar a estos pacientes, la agencia los denominó como “casos de infección en vacunados”.
Sin embargo, aún es muy poco lo que se conoce respecto a las personas que se contagian después de la primera dosis y antes de ser inoculadas con la segunda. En este contexto, las autoridades sanitarias, alrededor del mundo, se cuestionan cómo deben actuar frente a estos casos y en qué momento deben de administrarles la dosis de refuerzo.
Esto se debe a que durante la infección natural también se generan anticuerpos que protegen al organismo humano, en caso que este vuelva a entrar en contacto con el SARS-CoV-2, evitando el resurgimiento de la enfermedad.
Por ello, los encargados de tomar las decisiones en torno a la vacuna se cuestiona si las segundas dosis deberían ser dirigidas a otros sectores de la población que aún se encuentra en la espera de ser vacunados o donadas a las regiones en desarrollo que aún no tiene la posibilidad de adquirirlas.
¿Estos casos ponen en duda la eficacia de las vacunas?
Isabella Ballalai, vicepresidenta de la Sociedad Brasileña de Inmunizaciones, en una entrevista para la BBC, explicó que los contagios durante el intervalo de una y otra dosis pueden ocurrir. La especialista señaló que esto pasa porque la inyección principal alcanza su capacidad protectora hasta pasados los primeros 14 días.
La representante del centro médico destacó que este lapso es aplicable, tanto para la vacuna contra el Covid-19, como para los tratamientos de otras enfermedades infecciosas. La prolongación de este periodo tiene que ver con el tiempo que las células inmunitarias se toman para reconocer los antígenos de los viales, sustancia que provoca que el sistema inmune genere anticuerpos.
¿Qué decisiones están tomando en otras partes del mundo?
El Sistema de Información y Noticias Científicas (SINC), en una publicación reciente, notificó que el gobierno de España ya ha tomado medidas en torno a estos casos.
En el sitio web del gobierno español se especifica que las personas con más de 65 años, que contraigan el Covid-19 luego de la aplicación de la primera dosis, serán aisladas durante 15 días o hasta dar negativo a la prueba diagnóstica. Posteriormente serán inoculadan con la segunda dosis de manera inmediata.
Mientras que aquellas personas menores de 65 años tendrán que esperar seis meses para recibir la dosis de refuerzo.
Carmen de Mendoza, investigadora de la Universidad Internacional de La Rioja (UNIR), expresó que aunque la persona infectada no cuente con la inmunización completa, estará protegida con cierta cantidad de anticuerpos.
“Si te infectas pasados unos días después de recibir la primera dosis, el sistema inmune va a desarrollar una respuesta, aunque no sea del todo completa”, destacó la experta, por lo que las probabilidades de atravesar la enfermedad grave disminuirán.
“El grado de protección de la primera dosis es variable en cada persona”, especificó.