La sequía extrema que se enfrentó en cientos de municipios del Estado y el país, generó graves daños a la producción de caña de azúcar en Tlacotalpan, demarcación que tuvo pérdidas hasta en un 75 por ciento, afirmó el alcalde Christian Romero Pérez.
En entrevista, el munícipe definió que la grave sequía también afectó otros productos como cítricos, así como a la producción ganadera.
“La cosecha bajó de 200 toneladas por hectárea, hoy cosechan 50 toneladas, de la sequía tan grande que hubo; la producción en la Cuenca fue muy compleja”, aseguró.
Estimó que unos 2 mil productores de caña se vieron dañados porque la producción disminuyó en tres cuartas partes, toda vez que dependen completamente de la lluvia y lamentablemente no cuentan con sistemas de riego.
Reconoció que no hay una tecnificación suficiente, pero ello se debe a que se requieren de muchos recursos económicos, pero «no es porque no quisiéramos”.
También debido a la sequía los pescadores tuvieron pérdidas, porque durante el estiaje del año pasado se secaron lagunas en las que la actividad prácticamente se desplomó.
“Es cierto, el problema de la sequía es nacional y fuimos afectados productores de caña, de ganado, pescadores porque se secaron muchas lagunas. Tenemos esa preocupación de qué pasará en cuanto se pasen las lluvias”, aseveró.
El presidente municipal reconoció que su administración no podrá apoyar a los productores porque no cuenta con recursos suficientes para enfrentar esta situación, apenas si tiene para el gasto corriente.
“Un ayuntamiento como el de Tlacotalpan no cuenta con los suficientes recursos y sería una mentira decir que vamos a organizar un programa para rescatar a los productores, porque no habría cómo, apenas salimos con el gasto corriente”, expuso.
Finalmente, advirtió que los productores no aguantarían otro año como 2019 con una sequía atípica, porque las pérdidas serían incuantificables.