Con 15 años de servicio en la Secretaría de la Defensa Nacional, Dalvy Itzia Quetzalli Aquino Flores, Capitán Primero Ingeniero Constructor, perteneciente a la Dirección General de Ingenieros, reconoce que ser madre y militar es difícil pero no imposible.
Al igual que las madres profesionistas enfrentan complicaciones para atender, cuidar y sacar adelante a sus hijos, pues la mayor parte de su tiempo lo demanda el Ejército Mexicano.
Aunque que tiene largas jornadas de trabajo, debe administrar su tiempo entre la milicia, el papel de madre, ama de casa y esposa.
“Nuestra vida familiar y laboral es tan complicada como la de cualquier madre profesionista, hay que combinar todos los tiempos porque este trabajo como militar es de entrega, bueno más bien no es un trabajo es una vocación 24/ 7 y debemos combinarla con la vida personal”.
En la actualidad se desempeña como ingeniero residente en obra de la construcción de instalaciones para apoyo de tareas de seguridad pública en el estado de Veracruz en el municipio de Manlio Fabio Altamirano y Amatlán de los Reyes.
De hecho, tiene a su cargo la construcción de una base militar para uso de la Guardia Nacional, así como helipuerto en esta zona.
Recuerda que ingresó a las fuerzas armadas un mes de septiembre del 2007 y formó parte de la primera generación de mujeres que ingresaron a las fuerzas armadas en diferentes carreras, como ingeniero constructor, Colegio Militar, Colegio del Aire y a otros planteles.
«Ya desde hace años se encuentran abiertas las escuelas de las armas y los servicios de la SEDENA para mujeres. En la que yo me desempeño está bajo el porcentaje porque apenas tiene diez años abierta, en la que me desempeño apenas tiene diez años abierta a mujeres y un 20 por ciento son mujeres, pero se va a poner a la par dentro de pocos años».
A sus 35 años de edad Dalvy Itzia Quetzalli Aquino Flores, tiene un bebé de 10 meses, que se ha convertido en su compañera de viajes por la edad que tiene, pero reconoce que conforme vaya creciendo será más complejo por su educación.
Por fortuna, cuentan con varios apoyos por parte del Ejercito Mexicano y la Fuerza Aérea como son las guarderías y otras facilidades más que dan para las madres trabajadoras.
Recuerda que proviene de una madre profesionista y ahora busca hacer las mismas cosas que ella hacía cuando era chica, “que pese a que el trabajo que tenía era pesado, se daba tiempo para atendernos a nosotros en las tardes y en las noches, o los fines de semana, hay que tratar de estar con los hijos y darles todo el tiempo posible con ellos”, comenta.
Platica que a unas horas de que en México se celebre el Dia de las Madres, manifiesta que la vocación que sienten por servir a México es grande, pero el de darse la mayor posibilidad de estar con su hija también lo es.
Aunque por ser Día de las Madres la SEDENA da este día de descanso a las madres que forman parte de sus tropas, en el caso de la ingeniero constructor no celebró, pues la construcción de la base para la Guardia Nacional requiere su atención.