Experimentar una ola de calor durante la transición hacia la menopausia, conocida como perimenopausia, puede ser aún más desafiante para muchas mujeres debido a los síntomas que experimentan.
Este período evolutivo es una experiencia única y personal, diferente para cada mujer. Mientras que algunas lo atraviesan sin problemas, para otras puede ser una etapa llena de complicaciones tanto a nivel personal como laboral.
Los síntomas como la fatiga, los sofocos, los trastornos del sueño, la confusión mental, las palpitaciones, las alteraciones menstruales, la ansiedad, los dolores de cabeza, los problemas de memoria y concentración, los cambios de humor, se ven agravados por las altas temperaturas de una ola de calor, creando una tormenta perfecta de malestar.
Independientemente de la presencia de una ola de calor, la menopausia es una etapa de la vida que muchas organizaciones están trabajando para visibilizar y normalizar.
En algunos países, se están implementando medidas concretas para promover el bienestar y la salud de las mujeres en esta etapa. Por ejemplo, en Estados Unidos y el Reino Unido, muchas empresas están adoptando políticas para apoyar a las mujeres durante la menopausia, como la creación de espacios de descanso con temperatura controlada, horarios flexibles y ayuda para acceder a tratamientos adecuados. Recientemente, el alcalde de Nueva York, Eric Adams, prometió en un discurso respaldar la implementación de «lugares de trabajo más amigables con la menopausia». La Sociedad Europea de Menopausia y Andropausia recomienda la implementación de medidas como:
- Crear conciencia entre los empleados sobre la menopausia.
- Permitir a las mujeres hablar sobre los síntomas incómodos que experimentan.
- Revisar la temperatura y ventilación de los lugares de trabajo.
- Reducir el estrés relacionado con el trabajo.
- Ofrecer modalidades de trabajo flexibles.
- Proporcionar a los empleados acceso fácil a agua potable fría y servicios adecuados.
