Veracruz, tierra de encantos y tradiciones, no deja de sorprender a sus visitantes con nuevos atractivos turísticos que invitan a la diversión y a capturar momentos memorables.
En el malecón de Veracruz, un gigantesco coco se erige como un ícono que no pasa desapercibido. Rodeado de palmeras y con una vista espectacular del mar y los barcos que ingresan al puerto, este coco se ha convertido en un punto de referencia para turistas y residentes que buscan inmortalizar su visita con una fotografía junto a este peculiar fruto tropical.
Pero eso no es todo. A pocos pasos de distancia, en la plaza del Marino Mercante, aguardan unas chanclas gigantes que capturan la atención de todos los que pasan por allí. Junto a ellas, unos lentes de sol de gran tamaño y una paleta de hielo, elementos que evocan el espíritu playero y que son el complemento perfecto para una foto divertida y colorida.
Los prestadores de servicios turísticos destacan que tanto el coco gigante como las chanclas son nuevos atractivos que han conquistado el corazón de los visitantes, quienes no dudan en tomarse una selfie para llevarse un recuerdo imborrable de su paso por Veracruz.
Esta semana el malecón de Veracruz se llenó de vida con la presencia de personas. Algunos optaban por refrescarse con una nieve ante el intenso calor, mientras que otros se embarcaban en recorridos por la bahía, explorando lugares como Cancuncito y más.
Pero la diversión no se limita al malecón. En el parque Zamora, una réplica de playa espera a los visitantes. Completa con palmeras, un faro, un salvavidas y hasta una silla para posar, esta colorida playa artificial ofrece la oportunidad perfecta para sentir la brisa marina y disfrutar de un momento playero sin salir de la ciudad.
Con sus encantos naturales y sus atractivos únicos, Veracruz continúa siendo un destino imperdible para quienes buscan vivir experiencias inolvidables y disfrutar de la calidez y la alegría que caracterizan a este maravilloso estado.