
Poza Rica, Ver. – Las recientes inundaciones que azotaron la zona norte de Poza Rica han dejado un panorama devastador para el sector comercial de la ciudad.
Cámaras empresariales y comercio en general reportan pérdidas incalculables o por miles de pesos, estimando recuperarse, conforme a los avances, según el tipo de daño sufrido.
Carlos Daniel Guerrero, propietario de una cremería en la Central de Abastos, lamentó haber perdido todo su inventario, el cual había surtido apenas unos días antes de la inundación.
“El último trailer que llegó fue de 380 mil pesos, eso más los equipos, dos cámaras de refrigeración, computadoras, el clima, impresoras, papeleo de facturas”, lamentó.
El nivel del agua en su local superó los tres metros de altura, dañando refrigeradores, materia prima y productos que jamás imaginó ver bajo el agua. En la inundación de 1999, recuerda, el agua no alcanzó ni medio metro, por lo que nunca pensó que esta vez sería diferente.
El comerciante estima que podrá recuperarse en aproximadamente un mes, tiempo en el que espera reponer el equipo siniestrado. Tendrá que adquirir todo nuevamente, ya que su negocio solo contaba con seguro contra incendios y robo, no contra desastres naturales.
Claudia Reina Ledesma, presidenta de la Cámara Nacional de Comercio (Canaco) en Poza Rica, advirtió que cerca del 70% de los negocios establecidos en la zona inundada resultaron afectados por el fenómeno, lo que representa un duro golpe para la economía local.
“Estamos devastados, medio funcionan algunos negocios, otros siguen sin funcionar, es una situación muy crítica, muy triste, estamos sufriendo, es una situación bastante desafiante y muy dura para todos”.
Aunque se estima que el 35% de la ciudad fue alcanzado por las aguas, la falta de comunicación ha dificultado el levantamiento de un censo preciso. “No hemos podido contactar a todos los afiliados ni al comercio en general. Las llamadas no entran, se cortan, y muchos comerciantes están ocupados limpiando sus casas y negocios”, explicó.
Frente a esta emergencia, Canaco ha comenzado a levantar su propio censo para enviar la información a las autoridades y solicitar apoyos. Entre las peticiones destacan prórrogas o condonaciones en el pago de impuestos, cuotas del IMSS e Infonavit. Sin embargo, es muy pronto para saber que tipo de ayuda recibirán.
La situación se agrava ante la cercanía de la temporada decembrina, considerada una de las más importantes para el comercio local. Muchos negocios perdieron su inventario completo, lo que compromete sus ventas de fin de año.
A pesar del panorama adverso, Ledesma confía en la resiliencia de los comerciantes y la solidaridad de la comunidad. “Nos distingue la fortaleza para seguir adelante. Quizás no logremos las metas de otros años, pero tengo fe en que juntos saldremos adelante”, afirmó.
Además, hizo un llamado urgente a las autoridades para que no abandonen a los comerciantes. “Hay zonas a las que ni siquiera se puede entrar. Sabemos que están trabajando, pero todo se siente muy lento. Necesitamos más apoyo”.
La reciente inundación que afectó a la ciudad ha impactado al sector hotelero, con varios establecimientos reportando daños estructurales y una ocupación inusualmente alta, impulsada por brigadas de apoyo y voluntarios. Así lo informó Guillermo Salinas Cedillo, presidente de la Asociación de Hoteles y Moteles del norte del estado de Veracruz.
Salinas Cedillo detalló que los hoteles ubicados en las avenidas Ejército Mexicano y Puebla —zonas cercanas al río— fueron los más afectados. Entre ellos se encuentran el Hotel Wendolin, Río Vista Inn, Fiesta Inn, Plaza Real y París Express, todos con daños considerables que han limitado su operación.
“Los que sufrieron afectaciones mayores que todavía no pueden operar y que sí se va a pasar un tiempo en labores de limpieza, sí. Hay algunos otros que sí tuvieron en afectaciones, pero menores y están operando sin mayor problema”, explicó.
A pesar de los daños, la ocupación hotelera en Poza Rica y zonas aledañas como Papantla se encuentra en niveles altos, alcanzando hasta un 90%. Sin embargo, Salinas Cedillo aclaró que gran parte de esta ocupación no representa ingresos directos, ya que muchos hoteleros han ofrecido habitaciones en cortesía a grupos de voluntarios y personal de apoyo.
La Asociación de Hoteles y Moteles está levantando un censo detallado de los daños, que incluye infraestructura, mobiliario y operatividad. Este informe será presentado a la Secretaría de Turismo del estado con el objetivo de gestionar apoyos, como créditos blandos para la recuperación de mobiliario y asistencia a las familias de trabajadores del sector turístico.
“Después que ya tengamos todo esto integrado, seguir con el tema de la promoción turística, hacer una campaña de promoción turística para precisamente la reactivación de la zona, porque hay que recordar que el turismo no nada más se beneficia la gente que lo trabaja directamente como los hoteles o los restaurantes, sino el turismo genera derrama en toda la región”, subrayó Salinas Cedillo.
Respecto al tiempo estimado para la recuperación total de los hoteles afectados, el presidente de la asociación indicó que aún es pronto para determinarlo, ya que se siguen cuantificando los daños y evaluando las posibilidades de cada propietario.
“Poza Rica ya venía manejando una ocupación baja, lo que complica aún más la recuperación. Esperamos tener un panorama más claro una vez que se concluya el recuento de daños”, dijo.
Salinas Cedillo expresó su agradecimiento a todas las personas, organizaciones y municipios vecinos que han colaborado en las labores de limpieza y rescate, incluyendo el envío de maquinaria, alimentos e insumos.
Al menos seis restaurantes afiliados a la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac) resultaron afectados por la reciente contingencia que golpeó a la ciudad, según informó José Francisco Cervantes, representante de Canirac en Poza Rica.
Aunque el número exacto de establecimientos dañados aún está por confirmarse, Cervantes señaló que todos los socios han reportado algún tipo de afectación, desde pérdidas menores hasta daños significativos en infraestructura y equipo.
Actualmente, los propietarios y trabajadores de los restaurantes se encuentran realizando labores de limpieza y saneamiento de manera individual, con la esperanza de reabrir sus puertas lo antes posible.
“Los mismos trabajadores están haciendo el apoyo para hacer el saneamiento, limpieza en los restaurantes donde son colaboradores. Se les está respetando su salario”.
Solicitan apoyo económico para recuperar mobiliario y equipo
Desde Canirac Veracruz se está elaborando un listado de establecimientos afectados que será enviado a Canirac Nacional, con el objetivo de gestionar apoyos, los restauranteros solicitarán principalmente respaldo económico para reponer mobiliario, equipos de refrigeración y maquinaria de cocina.
Mientras se espera una respuesta concreta por parte de Canirac Nacional y de las autoridades de los tres niveles de gobierno, los restauranteros continúan trabajando con sus propios recursos para recuperar sus espacios y mantener el empleo de sus colaboradores.