
Doña Lulú fue una veracruzana iniciadora y copropietaria de las picadas más emblemáticas y tradicionales de Veracruz mejor conocidas como Doña Bella.
Definitivamente una pérdida sensible, su sazón en los antojitos hizo que Doña Lulú se posicionara a través de los años en su negocio de picadas y gorditas, como uno de los más concurridos y preferidos de los comensales jarochos.
La también llamada «Reina de las Picadas«, a su familia le inculcó el amor al negocio, la humildad para atender al cliente, y el corazón puesto en la preparación de los alimentos, lo que fue abriendo paso a toda su descendencia en la gastronomía porteña.
La señora María de Lourdes Andrade, «Doña Lulú, fue velada este viernes 18 de abril en la Funeraria la Luz. Descanse en paz
