A pesar que la gente golpeó, provocó y asustó a los indefensos toros durante las fiestas religiosas de la Virgen de la Candelaria, el alcalde Luis Medina Aguirre, dijo que el saldo fue blanco.
Aunque no precisó la cifra, el presidente municipal reconoció que hubo algunos lesionados y caídos que no pasaron a mayores.
«Hasta el momento tenemos saldo blanco hay un grupo donde se está informando de lo que está pasando, lógicamente algún lesionado, caído, alguna persona intoxicada que se puede ver, pero me decían los de la Cruz Roja que ha hecho viajes y no ha pasado a mayores. Lo que sí invitamos a la población a que regrese con cuidado a sus lugares de origen».
Argumentó que la suelta de toros es la actividad que más llama la atención de los religiosos lugareños y pobladores de regiones aledañas.
Afirmó en ese tenor que la ocupación fue total en hoteles, air&b y casas de rentas, donde aseguró incluso que habilitaron el estadio de béisbol de la localidad para que personas y familias pudieran acampar y pudieran disfrutar de la suelta de toros.
«La fiesta nos rebasa pero que nos lleva esto, una derrama regional porque se quedan en Cosamaloapan, en Lerdo, en Cabada, se queda en Alvarado y Veracruz que está a 90 kilómetros de aquí pueden ir a venir».
Cabe mencionar que fueron seis toros, quienes lejos de atacar buscaban donde refugiarse de las agresiones de los asistentes, quienes los provocaban con patadas y golpes en la cara para poderlos torear.