-Eduardo de la Torre Jaramillo opinó que gobernar a través de ideologías es lo que ha impedido el desarrollo en Veracruz
Ángeles González Ceballos
Xalapa, Ver
El especialista en temas electorales, Eduardo de la Torre Jaramillo, definió que si una administración local no toma en cuenta la transparencia, la rendición de cuentas, la participación, la eficiencia y, sobre todo, la coherencia, no habrá una nueva forma de gobernar.
En conferencia de prensa, explicó que en la nueva forma de hacer gobierno se debe hacer partícipe a nuevos actores y aceptar que las administraciones ya no pueden resolver los gobiernos por sí solos.
Explicó que la incapacidad de los gobiernos debe llevar a que se teja una red de alianzas con los empresarios, con los colectivos de búsqueda de personas desaparecidas, de los colectivos de la diversidad sexual, entre otros.
«Se tendrá que invitar a esos actores que hoy por por razones ideológicas los desprecian, parecen que son como los de la mafia del poder», expresó.
El también consultor político consideró que todo aquel que quiera gobernar no debe incurrir en errores ideológicos como el alcalde de Xalapa, Hipólito Rodríguez Herrero, quien no quiso que su policía municipal se capacitara en la Academia Estatal de Policía y los mandó a Puebla.
Expresó que esa capacidad de gobernar a través de las ideologías es lo que ha impedido el desarrollo en Veracruz.
Por ello, reiteró que se debe pensar en una nueva manera de gobernar a través de la inclusión de grupos que no han estado en la esfera pública, pero que son necesarios para gobernar.
Otro elemento que hoy deben tomar en cuenta quienes quieren administrar los recursos públicos es la transparencia porque no se sabe qué están haciendo con los recursos públicos en ningún nivel de gobierno, así como la rendición de cuentas que tampoco la hay.
Añadió que la nueva gobernanza debe tomar en cuenta la coherencia de invitar a dichos sectores de la población para la formulación e implementación de las políticas que se necesitan desarrollar en los municipios y el Estado.