La entidad se encuentra en fase crítica de la pandemia de COVID-19; Parques, plazas y centros deportivos volverán a cerrar sus puertas; no habrá venta de bebidas alcohólicas.
Durango regresará a semáforo rojo a partir de este martes y al menos hasta el 17 de noviembre como consecuencia de un aumento en los casos positivos, la demanda hospitalaria y la velocidad de contagio.
Según informó el gobernador estatal José Rosas Aispuro Torres, la decisión de modificar el nivel de riesgo epidemiológico en Durango fue tomada junto con los alcaldes de la entidad y la Secretaría de Salud (SSa).
“#Durango enfrenta la etapa más difícil desde que se decretó la emergencia sanitaria a causa de #COVID19. Los casos de contagio y defunciones van en aumento, nuestro personal médico se encuentra cansado y desgastado. Este gobierno esta obligado a protegerlos y protegerte a ti”, escribió Aispuro Torres en su cuenta de Twitter.
El cambio comprende medidas como la suspensión de toda actividad económica no considerada como esencial. Los hoteles operarán con una ocupación máxima de 25% y sin áreas comunes. Los parques, plazas y espacios públicos permanecerán cerrados. Los restaurantes y cafeterías podrán atender al 25% de su capacidad y los puestos de comida sólo podrán ofrecer servicio para llevar.
Mercados y supermercados deberán atender con un aforo de 50% y permitiendo el ingreso de sólo una persona por familia. Las peluquerías, estéticas y barberías sólo tendrán permitido ofrecer servicio a domicilio y siguiendo los protocolos sanitarios.
Las actividades en gimnasios, albercas, centros deportivos, spas y centros de mansaje serán suspendidas. Las escuelas permanecerán cerradas y no será permitido realizar actividades en espacios públicos.