El Juez Octavo de Distrito, con residencia en la ciudad de Tuxpan, desechó una demanda de amparo que promovió Rogelio Franco Castán, en contra de la orden de traslado del penal de esa ciudad al reclusorio de Amatlán de los Reyes, al considerar que no agotó los recursos o medios de defensa existentes en la ley antes de exigir la protección de la justicia federal.
Franco Castán promovió un juicio de amparo ante el Juzgado Octavo para demandar que cesaran supuestos actos de incomunicación por parte del “Director del Centro de Readaptación Social del Estado”.
La demanda de amparo promovida por el exsecretario de Gobierno en la administración yunista, a quien se le trasladó al penal de Amatlán de los Reyes después de que se le vinculó a proceso por el delito de ultrajes a la autoridad y se le dictaran ocho meses de prisión preventiva oficiosa, quedó registrada con el número de expediente 129/2021.
En un inicio, el Juez Octavo de Distrito le concedió la suspensión de plano y de oficio para que las autoridades cesaran todo acto de incomunicación o malos tratos.
Sin embargo, una vez que Franco Castán ratificó la demanda de amparo, el juez federal analizó el acto reclamado por el Yunista y determinó desecharla totalmente por improcedente.
“Respecto del acto reclamado consistente en la orden de traslado, por no haberse agotado en su contra el principio de definitividad…se desecha de plano la demanda de amparo promovida por Rogelio Franco Castán, por notoriamente improcedente. También se desecha la demanda de amparo respecto del acto reclamado consistente en malos tratos e incomunicación.»
