En una cálida tarde, veracruzanos y visitantes se congregaron a lo largo del bulevar costero Manuel Ávila Camacho para ser testigos de un mágico Desfile Navideño que sumergió a la ciudad en el espíritu festivo que precede a la Navidad.
El bullicio y la anticipación se apoderaron del ambiente poco después de las 6:00 de la tarde, cuando un colorido contingente de comparsas, bailadores y carros alegóricos inició su recorrido en el bulevar costero. Desde la calle José Martí, en el fraccionamiento Reforma, el desfile tomó rumbo de sur a norte, deslumbrando a los espectadores hasta llegar al entronque con la avenida Xicoténcatl, en las proximidades del centro de la ciudad.
La primera joya del desfile fue un carro alegórico que representaba una locomotora, seguido de cerca por otro adornado con la inconfundible figura de Santa Claus. El brillo de las luces y la música festiva llenaban el aire, creando un ambiente mágico. Más adelante, otro carro destacaba la efigie de Yeri Mua, exreina del Carnaval, mientras que el cierre estaba a cargo de un hombre caracterizado como el icónico Santa Claus.
Entre los carros, se mezclaban comparsas de salsa que contagiaban su alegría, grupos juveniles, y enérgicos representantes de la cultura jarocha. Personajes del cine y la televisión también se unieron al desfile, añadiendo un toque de fantasía y diversidad al evento.
A pesar de su brevedad, el desfile dejó una impresión duradera en los corazones de quienes lo presenciaron. El bulevar Ávila Camacho se mantuvo cerrado a la circulación vehicular.
Así, entre risas, luces centelleantes y el vibrante espíritu navideño, Veracruz dio la bienvenida a las festividades con un desfile lleno de encanto y color.
