Xalapa, Ver.– La tradición del Día del Niño Perdido, con raíces profundas en la región huasteca, se llevó a cabo este 6 y 7 de diciembre, iluminando las calles con el fulgor de velas y uniendo a las comunidades en rezos y cánticos.
Esta festividad rememora el pasaje bíblico del Niño Jesús perdido en el templo, según el Evangelio de San Lucas, y se ha convertido en un símbolo de la devoción y la identidad cultural de la región.
En este marco, la Secretaría de Cultura de Veracruz extendió una invitación a la población para participar en las actividades que acompañan esta celebración, destacando su importancia como un patrimonio que refuerza los lazos comunitarios y las tradiciones del estado.