Nueva York. Nunca un presidente mexicano ha sido recibido así en una visita a Nueva York (o tal vez a cualquier parte de Estados Unidos) con cientos de activistas, simpatizantes, jóvenes y viejos, músicos, danzantes, familias enteras, coreando frente a la sede mundial de la Organización de Naciones Unidas “es un honor estar con Obrador” y “no estás solo”.
Llegaron desde temprano la mañana de este martes para acompañar a su presidente mientras éste presidía el Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas (ONU), caminando a lo largo de las 5 o 6 cuadras de la Primera Avenida frente a las instalaciones del organismo mundial y congregándose en la Plaza Dag Hammarskjold a un lado para ver en una pantalla gigante su intervención en ese foro como después un mensaje grabado y trasmitido ahí para los paisanos.
“Que no nos engañen más”, le comenta una mujer a otro simpatizante al explicarle la importancia para ella de la llegada de López Obrador a la presidencia de México. En otra conversación, un hombre alto con una pancarta de apoyo a AMLO comentaba a su colega chaparro: “fíjate que he aprendido más sobre la historia durante esta presidencia que en toda mi vida”.
Algunos llevaban mantas y pancartas informando desde donde venían: la mayoría era de “Puebla York”, pero otros anunciaban que eran de Virginia, de California y Texas y hasta uno de Seattle en el estado de Washington al otro extremo de este país. Después divulgaban sus lugares de origen – además de Puebla, mencionaron Michoacán, Morelos, Oaxaca, Guerrero entre otros.
El excelente Mariachi Habanero – conformado de hombres y mujeres – ofreció “México Lindo y Querido”, “Canción Mixteca”, “Cielito Lindo” y otras clásicas tanto dentro del parque y, con admirable habilidad, mientras caminaban con los participantes sobre la Primera Avenida.
En la plaza también se realizaron danzas, incluyendo una de concheros que llenó el ambiente neoyorquino con el aroma del copal, otra más de chinelos, y más. Un gran cantante cautivó con una canción de amor a Michoacán que incluía una extensa lección de geografía de sus pueblos y ciudades, como otra dedicada a la 4T.
La música y danza tuvieron un intermedio cuando en la pantalla gigante en medio de la plaza apareció la sala del Consejo de Seguridad e inicio la transmisión en vivo de la sesión presidida por López Obrador – México ocupa por este mes la presidencia rotativa de la entidad más poderosa de la organización mundial. Al aparecer su imagen brotaron “vivas” y gritos de emoción y elogio.
Escucharon el discurso atentamente, interrumpiendo con aplausos en algunos momentos sobre todo cuando López Obrador se refirió a la desigualdad extrema entre los ricos del planeta y los pueblos. Cuando intervinieron otros, los aproximadamente 350 presentes empezaron a perder la paciencia con la retórica oficial que suele practicarse en esos eventos, y por fin ganaron los coros de los simpatizantes del presidente y de Morena sobre los monólogos del Consejo de Seguridad.
Poco después, de nuevo imperó el silencio al proyectarse el mensaje de López Obrador para los inmigrantes grabado esta misma mañana desde dentro de la ONU. Cuando declaró que “hay muchos aquí afuera”, hubo una respuesta alegre, y al continuar el mensaje, muchos expresaron gratitud de que habían sido reconocidos, y casi hubo un dialogo entre los presentes y la figura en la pantalla. “Los héroes migrantes te apoyamos”, afirmaba una pancarta.
Hubo algunos que comentaron que fue desafortunado que Lopez Obrador mencionó, en ese mensaje, que Donald Trump había sido “respetuoso” de México como hoy lo es Joe Biden. Muchos aquí pasaron cuatro años padeciendo personalmente la persecución e intimidación de la comunidad bajo el presidente más explícitamente antimigrante de la era moderna.
Por otro lado, aunque la abrumadora mayoría de los participantes estaban unidos en su ferviente apoyo de lo que repitieron es “el mejor presidente de la historia”, ese apoyo no necesariamente era extensivo a todo los que representan su gobierno. De hecho, algunos de los mismos organizadores de este “festival” de apoyo, entre ellos el Comité Nueva York 1 de Morena y Alianza Mexicana, expresaron, en un comunicado y en comentarios con reporteros, que “se desea que la Cuarta Transformación llegue a los mexicanos en el exterior”, otorgándoles los derechos plenos, incluyendo el del voto, de todo ciudadano mexicano.
Más aún, subrayaron que desean que esa “transformación” llegue a los consulados y sus “burocracias doradas”. Concluyen, en su comunicado difundido hoy, que “se pide que sus funcionarios vengan a servir y no a ser servidos… Se piden servicios de excelencias a la altura de la aportación de remesas”.
El festejo popular de López Obrador, bautizado como el “Amlofest”, culminó cuando de repente los cientos que estaban esperando su salida de la ONU lo vieron junto con su comitiva al otro lado de la barda dentro de esas instalaciones, levantando los brazos en un saludo a la fila de paisanos con sus mantas y banderas. “Se ve, se siente, AMLO está presente”, corearon. Los saludos y expresiones de cariño continuaron de un lado al otro.
Con ello, concluyo su visita relámpago a esta ciudad internacional de inmigrantes.