La reciente creación de la Agencia Estatal de Energía representa un riesgo para los pueblos de la Sierra Norte de Puebla, ya que sus facultades están orientadas a facilitar la implementación de la reforma energética del expresidente Enrique Peña Nieto, justificando el despojo para la creación de proyectos de muerte como minerías e hidroeléctricas.
Así lo expuso el Consejo Tiyat Tlali de la Sierra Norte en su pronunciamiento por la asamblea número 31, al considerar que la agencia justifica el despojo en la búsqueda de crecimiento económico orientado a incentivar un consumo irracional e insostenible.
“La tierra no aguanta más, los efectos del calentamiento global son prueba del fracaso del modelo energético basando en combustibles fósiles, en manos de la ambición de los intereses económicos trasnacionales”, señaló el colectivo en un comunicado.
A partir de la asamblea, el Consejo Tiyat Tlali decidió centrar sus esfuerzos para demostrar que es posible producir vida sin destruir, generar energía sin desviar los ríos, que se puede seguir produciendo alimentos sin contaminar y que han decidido avanzar en hacer realidad la autonomía sin dejar de resistir y denunciar las agresiones que violentan sus derechos.
La organización envió un mensaje a las grandes corporaciones y al gobierno de que: energía sí, desde y para los pueblos, energía sí, pero no a costa de la destrucción de la tierra y el agua; energía sí pero sólo para avanzar hacia la soberanía energética y los proyectos de vida. ¡Sí a los planes de vida de los pueblos de la Sierra Norte de Puebla!”.
El 21 de noviembre pasado el gobernador Luis Miguel Barbosa anunció que una vez que se conformara la Agencia Estatal de Energía -que es presidida por el actual jefe de la Oficina del Gobernador, Rodrigo Osorio-, se concretarían inversiones por 38 mil millones de pesos, ya que hay cartas de intención de empresarios recibidas por la administración.