La brecha salarial de género sigue siendo una realidad. Según la empresaria Lorena Arredondo Delgado, las mujeres ganan 35 por ciento menos que sus contrapartes masculinas en diversos sectores y ocupaciones. Esta disparidad salarial refleja desigualdad en el ámbito laboral, a pesar de los avances en la lucha por la equidad de género.
Esta disparidad económica afecta a mujeres de todas las edades y niveles de educación, desde recién graduadas hasta profesionales con experiencia.
“La mayoría de las personas de este país estamos viviendo opresión, en la casa, en las calles. Hay feminicidios y las mujeres seguimos ganando 35 por ciento menos que los hombres aún cuando hagamos las mismas funciones más la doble jornada laboral que es la que nos toca llegar al hogar y ser la responsable de los hijos”.
A pesar de contar con la misma formación y experiencia laboral, las mujeres se enfrentan a una marcada discriminación salarial. Esto no solo impacta en su bienestar financiero, sino que también la desigualdad en términos de oportunidades y acceso a recursos.
Para cerrar la brecha se debe contemplar políticas de igualdad salarial, transparencia en la remuneración y la promoción de un entorno laboral inclusivo que promueva la equidad de género.
“No puede haber desarrollo si la mujer sigue en situación de opresión, porque es una situación de opresión la que se da en las empresas. No se dice pero existe y en la vida cotidiana no volteamos a ver a las mujeres y aunque se quiera aportar se nos descalifica y no se nos escucha”.
Se necesita garantizas un trato justo y equitativo para las mujeres lo que se reflejará en mejores condiciones para todos.