-Josué Cervantes señaló a los «tramposos» y «depredadores» de abusar de los más desvaforecidos
Ángeles González Ceballos
Xalapa, Ver
Si las elecciones se cuestionan, no es por lo que hace la ciudadanía en las casillas; es, en todo caso, por lo que hacen los enemigos de la democracia, expresó el vocal ejecutivo de la Junta local del INE, Josué Cervantes.
Durante la sesión de Seguimiento a la Jornada de Votación
de la Revocación de Mandato, señaló a esos «tramposos», dispuestos a abusar de la pobreza, de los más desfavorecidos comprando su voluntad por miserias o amenazando con privarles de lo poco que reciben legítimamente, haciéndoles creer que es un gesto generoso, cuando en realidad es una vil estafa de sus «depredadores»
En su mensaje, destacó que llegó tiempo de la ciudadanía.
Aseveró que el empeño del personal administrativo y del servicio profesional electoral, con el compromiso y el voto de consejeras y consejeros electorales, y bajo la vigilancia de las representaciones partidistas acreditadas; el INE localizó y aprobó los lugares para la ubicación de las casillas; y, con el apoyo del cuerpo de supervisores y capacitadores, insaculó y capacitó al funcionariado para su integración.
Asimismo, dispuso también el listado nominal junto con la documentación y materiales electorales.
«Pero ahora es tiempo de dar paso a los actores únicos y legitimados para actuar en este ejercicio eminentemente ciudadano.
Lo que sigue, de hecho, lo que inició hace unos pocos minutos y así continuará a lo largo del día, será el despliegue del poder ciudadano, con toda su potencia y con todas sus consecuencias», subrayó.
Josué Cervantes, afirmó que es un hecho cierto e irrefutable que la ciudadanía confía ampliamente en el INE, pero confía en el INE, en su INE, precisamente porque hay un punto en que las elecciones y ahora los mecanismos de participación directa tienen un tiempo en el que la autoridad electoral y los actores políticos dan paso al auténtico depositario de la soberanía nacional: al cuerpo electoral.
Refirió que el manual del funcionariado de casilla le enseña a la ciudadanía cuestiones técnicas tales como la forma de instalar la casilla y el modo de conformar los expedientes de la paquetería electoral, pero, paralelamente, hace mucho más cuando le dice cómo recibir la votación de sus vecinas y vecinos, de las personas de su localidad, y le dice cómo escrutarla clasificándola y contándola correctamente, dando a cada voto un sentido igualitario sin identidad.
Asimismo, al margen de situaciones personales y particulares como el género, las condiciones sociales y económicas, la pertenencia o no a un grupo étnico, en fin, le dice a la ciudadanía que los votos se cuentan y se cuentan bien, y esa es la prueba contundente de que las elecciones se celebran de manera total y absolutamente limpia y transparente.
«Si las elecciones son cuestionadas, créanme, no es por lo que sucede en las casillas y la gente lo sabe. A esta fecha podemos sumar millones de personas que han recibido y contado correctamente los votos y todas esas personas lo saben y lo comentan con su familia y con amistades y lo platican a sus conocidos», enfatizó.
Fue ahí donde sostuvo que si las elecciones se cuestionan, no es por lo que hace la ciudadanía en las casillas; es, en todo caso, créanme también, por lo que hacen los enemigos de la democracia.
Por ello, reconoció a todos aquellos ciudadanos y a todas aquellas ciudadanas responsables que en este día, una vez más, recibirán y contarán de la manera más pulcra y correcta los votos de quienes voluntariamente decidan acudir a las casillas a opinar.
Definió que nada le hará más bien a la democracia que quienes participen en este ejercicio ciudadano lo hagan de manera libre e informada, con la absoluta confianza de que las consecuencias de los resultados, sean cualesquiera que estos sean, lo serán para bien del país.
«Auguro, pues, desde este momento, una jornada pacífica y lo será por la siempre y trascendente razón de que habrá de transcurrir en el tiempo de la ciudadanía», concluyó.