Una atracción imperdible para las fiestas decembrinas es ver el árbol de Navidad en Rockefeller Center. Sus luces, que titilan como miles de estrellas, y su imponente tamaño convierten esta plaza en un verdadero paraíso invernal.
La tradición de encender este majestuoso abeto se ha convertido en un símbolo de la Navidad en Nueva York, atrayendo cada año a millones de visitantes que se maravillan ante su belleza y se deslizan por la icónica pista de hielo, creando recuerdos inolvidables.